Miércoles, 26 Enero 2011 12:29

Luego de 10 años, muchos sobrevivientes del terremoto de India se aferran a la vida

Los hijos de los sobrevivientes del terremoto permanecen en una frágil carpa a la intemperie en el pueblo de Anjar, en el estado occidental de Gujarat. Foto: Amit Dave/ Reuters

Por AltertNet – Traducción del inglés: G. Merino/IG-EPN

BHUJ, India - Cuando el suelo se sacudió en el estado de Gujarat, corazón industrial de la India, una soleada mañana una década atrás, destruyendo casas y matando a miles de personas, las autoridades realizaron un gran esfuerzo para la reconstrucción.

Exactamente diez años después, mientras Gujarat se desarrolla dentro de un modelo de progreso industrial en India, miles de víctimas de ese terremoto continúan recuperándose en frágiles covachas de madera y zinc, sin compensaciones y con poca comida y agua.

El terremoto de 7,9 grados golpeó durante la fiesta de celebración del 51 aniversario de la Independencia de India, el 26 de enero de 2001. Hacia las 9 de la mañana, mientras los niños corrían para izar la bandera hindú, el suelo en Gujarat se movió matando a alrededor de 14 mil personas, hiriendo a más de 150 mil y dejando a millones sin casa. El sismo casi arrasó con cuatro de los mayores pueblos incluyendo Bhuj y Anjar en la región de Kutch, estado de Gujarat, en la frontera con Pakistán.

A lo largo de Kutch, grupos de refugios temporales donde la vida es una increíble lista de calamidades dan testimonio de la inacabada tarea de recuperación, a pesar de los más que aceptables esfuerzos de las autoridades, quienes calcularon en 6,9 la magnitud del movimiento,  pordebajo de los 7,9 grados que le dio el Servicio Geológico de Estados Unidos.

Al igual que para las otras víctimas, las ofertas de reconstrucción del gobierno suenan falsas para Pushpa Jaysih, de 80 años.

“Tengo que ir por los alrededores con un cuenco vacío a rogar por agua”, dice a Reuters Jaysih, quien perdió a su hija y a su casa en Anjar, en su frágil covacha que originalmente debía tener una vida útil de máximo dos años pero que se ha convertido en una casa permanente para ella.

“Nadie viene aquí para ver cómo estamos viviendo… Únicamente durante las elecciones ellos prometen ayudar, pero nunca lo hacen”, dice Jaysih, quien  trabaja cosiendo terminados para vestidos.

Pobres ignorados

Los socorristas hablan de miles de sobrevivientes del terremoto –la mayoría de los cuales se encuentran por debajo de la línea de pobreza urbana- que han sido excluidos de los altamente promocionados planes de rehabilitación y reconstrucción.

“El terremoto de Gujarat afectó a los sectores medios de la sociedad, especialmente a aquellos que vivían en casas más viejas”, decía un reporte del Comité de Emergencias por Desastres, radicado en Reino Unido, después del sismo.

“Hubo efectos sobre todos, pero los pobres son siempre más vulnerables cuando se trata de conseguir ayuda, en tanto que las clases medias tienen un buen acceso a los medios para su recuperación.”

El gobierno de Gujarat y las agencias de ayuda fueron reconocidos por su respuesta y las autoridades pusieron en marcha un muy aplaudido plan de rehabilitación. Sin embargo, aún existen muchos lugares a lo largo de la últimamente muy seca región de Kutch –tanto urbanos como rurales- donde los sobrevivientes permanecen desesperanzados sin forma de recuperarse, en medio de la apatía del gobierno.

Pocos tienen acceso a agua limpia. La mayoría hace sus necesidades al aire libre. Y muchos luchan para conseguir dos comidas al día para sus familias.

“Muchos de ellos pertenecen a tribus, otros son parte de comunidades de las ‘castas bajas’, los hay musulmanes, pero todos ellos tienen una cosa en común… la pobreza”, dice Bharat Parmer, el coordinador del programa Acción de Ayuda Internacional en Kutch.

“Un gran número de estas personas arrendaban y no poseían tierras de modo que ha sido mucho más difícil para ellos reclamar sus derechos, ya que la rehabilitación se enfocó mayormente en los propietarios de terrenos y viviendas.”

No obstante, las autoridades locales dicen que sus planes de recuperación fueron incluyentes y que, de lejos, han cubierto a todos aquellos que fueron golpeados por el terremoto.

“No creo que haya gente que no recibió aquello que necesitaba –puede haber uno que otro caso por aquí o allá-, pero hemos recuperado todo lo que necesitaba ser recuperado”, dice Gunvant Vaghela, contador y el segundo servidor público más antiguo en el distrito de Kutch.