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Miércoles, 10 Agosto 2011 07:36

Logran predecir erupción volcánica submarina

NUEVA YORK. Científicos lograron predecir por primera vez una erupción volcánica submarina, registrada hace unos días en el Océano Pacífico frente a Estados Unidos y que había sido anticipada hace cinco años.

por AFP
10 de agosto de 2011

Eso anunció el martes la Universidad de Columbia en Nueva York.

La erupción tuvo lugar el pasado 29 de julio en el volcán submarino Axial, uno de los más activos y más estudiados del mundo, situado en el Pacífico a unas 400 kilómetros de las costas del estado de Oregon (Estados Unidos). El geólogo Bill Chadwick, de la Universidad del estado de Oregon, y el geofísico Scott Nooner, de la Universidad de Columbia, habían publicado un estudio en 2006 en el que predecían que el volcán Axial entraría en erupción antes de 2014.

Para ello, se habían basado en diez años de investigación y en mediciones del fondo del mar que mostraban la evolución del magma en el volcán, explicó el Instituto de la Tierra de la Universidad de Columbia en un comunicado. Los científicos descubrieron la erupción utilizando un robot submarino que halló rastros de lava recientes.

“Los volcanes son conocidos por lo difícil que son de predecir, y se sabe mucho menos de los volcanos submarinos”, dijo Chadwick, al frente de la expedición científica que navegó hasta el lugar para verificar el acontecimiento. “Cuando llegamos al lugar en el fondo del mar, pensamos que nos habíamos equivocado de sitio, porque todo parecía completamente diferente. No hallábamos nuestros instrumentos de monitoreo y otros elementos. Una vez que nos dimos cuenta de que se había registrado una erupción, fue muy excitante”, agregó.

De su lado, Nooner recordó que “en tierra firme, los científicos han perfeccionado técnicas para monitorear volcanes peligrosos como el Monte Rainier (en el estado de Washington, noroeste de Estados Unidos) o el Vesubio (sur de Italia)”. Sin embargo, “las falsas alarmas y las sorpresas desagradables, como la inesperada y fortísima explosión del Monte Santa Elena (noroeste de Estados Unidos) en 1980, son la regla y no la excepción”, señaló.

“No es que todos los volcanes sean iguales, pero esperamos que la investigación en el Axial añada una mejor comprensión del potencial comportamiento de volcanes similares”, concluyó.

Fuente: http://www.abc.com.py/nota/predicen-por-primera-vez-erupcion-volcanica-submarina/

Martes, 09 Agosto 2011 15:47

Sismo de Pomasquí - 10 de agosto de 1990

9 de agosto de 2011
El 10 de agosto de 1990 a las 22h00 (tiempo local), se produjo un sismo de profundidad somera y magnitud 5.0 en la escala de Ritcher, localizado a 4 kilómetros al Noreste de Pomasquí, 4.8 kilómetros al Sureste de San Antonio de Pichincha, 10 km al Noroeste de Guayllabamba y 15 kilómetros al Noreste del aeropuerto de Quito.
A pesar de ser un sismo de magnitud moderada, sus efectos fueron notorios: 3 personas muertas y 417 familias damnificadas (5000 personas afectadas aproximadamente), 900 viviendas afectadas con un costo de reparación de alrededor de 770 millones de sucres; daños a monumentos e iglesias coloniales en las zonas de Pomasquí, San Antonio de Pichincha y Calderón; 118 deslizamientos de tierra producidos a lo largo de la Panamerica Norte - entre Guayllabamba y el río Pisque - por lo que dicha vía fue cerrada por tres días en una longitud de 12 kilómetros. Las canteras ubicadas en la zona de Pomasquí fueron cerradas indefinidamente por temor a posibles deslizamientos y colapsos por efecto de las réplicas, lluvias e inestabilidad natural del material.

Casa afectada en el sector de Pomasquí por el sismo del 10 de agosto de 1990. fotografía tomada por Mario Ruiz.

Los daños causados por este sismo son muy grandes para la magnitud relativamente baja del mismo. Esto se debe a varios factores: la mala calidad del material de construcción (adobe y bahareque), falta de control y vigilancia en el diseño y construcción de las obras; y, efectos de amplificación de la señal sísmica por geología local (suelo arenoso y poco consolidado, lo que produjo una intensidad VII MSK en la zona epicentral).
Fragmentos tomados de: Informes de Actividades del Instituto Geofísico, Escuela Politécnica Nacional. 1989 - 1990. Junio, 1991
Antimio Cruz
2011-08-09
Fotografías satelitales publicadas ayer por la NASA demostraron que el terremoto y el tsunami que afectaron a Japón el pasado 11 de marzo viajaron miles de kilómetros y provocaron fracturas y desprendimiento de icebergs en el Polo Sur del planeta.

Las olas y vibraciones que viajaron 13 mil kilómetros desde el epicentro del sismo, en Japón, hacia el norte del planeta quebraron hielos que tenían miles de años juntos y que ahora son bloques de hielo flotantes con una superficie que mide más que un campo de futbol soccer. La superficie total afectada, de la cual se generaron esos desprendimientos, equivale a dos veces el tamaño de la isla de Manhattan, en Nueva York.

Un fenómeno parecido había sido registrado con narraciones verbales en el siglo XIX en América del Sur. Gigantescos bloques de hielo o icebergs fueron vistos frente a las costas de Chile después de que ocurrieron fuertes terremotos, pero ésta es la primera prueba, con fotografías satelitales. Uno de los datos más impresionantes es que la alteración surge de un terremoto originado a más de 13 mil 600  kilómetros del Polo Sur y pudo fracturar las gruesas capas de hielo, que tienen cientos de metros de profundidad.

El estudio fue publicado este lunes en la revista científica Journal of Glaciology y en el portal de la NASA en la dirección www.nasa.gov/topics/earth/features/tsunami-bergs.html.

ESTUDIO. El hallazgo fue encabezado por una científica llamada Kelly Brunt, que es experta en un campo de investigación llamado Criosfera, que es el estudio de las zonas del planeta que están permanentemente cubiertas con hielo. Su centro de trabajo es el Centro Goddard de Vuelo Espacial.

Ella y sus colegas pudieron demostrar que sí hay un vínculo, del tipo causa y efecto, entre el desprendimiento de gigantescos icebergs de la plataforma de hielo llamada Sulzberger, en la Antárctica

El nacimiento de un iceberg puede darse en múltiples procesos. A menudo, los científicos ven los monolitos imponentes, congelados, entrar en los mares polares y trabajan hacia atrás para averiguar la causa.

Por eso, cuando el tsunami de Tohoku fue provocado en el Océano Pacífico el 11 de marzo en la primavera, Brunt y sus colegas de inmediato miraron hacia el sur. Durante todo el camino hacia el sur utilizaron múltiples imágenes de satélite, Brunt, Emile Okal, de la Universidad Northwestern, y MacAyeal Douglas, de la Universidad de Chicago, fueron capaces de observar nuevos icebergs flotando en el mar poco después de que el oleaje por el tsunami llegó a la Antártida.

Para poner la dinámica de este evento en perspectiva: Un terremoto en la costa de Japón causó enormes olas que estallaron fuera de su epicentro. El agua se desplazó hacia una plataforma de hielo en la Antártida o Antárctica, a 13 mil 600 kilómetros de distancia, y cerca de 18 horas después de ocurrido el terremoto, las olas rompieron varios trozos de hielo que en conjunto equivalía a dos veces la superficie de Manhattan.

Gracias a que ya existía una hipótesis sobre este posible efecto, los científicos fueron capaces de ver las capas de hielo antártico en un proceso lo más cercano a tiempo real,  como lo permiten las imágenes de satélite, y echar un vistazo a un nuevo iceberg flotando en el mar de Ross.
09 de agosto de 2011

El día 29 de julio de 2011 el Instituto Geofísico recibió a través de una carta, una interesante propuesta planteada por el Señor Gonzalo de la Cruz. Dicha propuesta se refiere a la conservación del Aeropuerto Mariscal Sucre como sitio estratégico en caso de que un fenómeno natural en Quito llegará a convertirse en desastre. El Señor De La Cruz propone en su carta, que el Aeropuerto y toda su infraestructura debe ser conservados para que en caso de emergencia “se complemente y se convierta en soporte” para el nuevo aeropuerto.

Ponemos en consideración de toda la comunidad la carta y abrimos el debate para que todas aquellas instituciones involucradas consideremos seriamente, tan interesante propuesta.

LT

El presente estudio fue realizado por la Srta. Gabriela Andrade, estudiante de la Universidad Central dle Ecuador bajo la dirección del MSc. Jorge Bustillos, vulcanólogo del Instituto Geofísico. Para saber más, descargar documento adjunto.

Introducción

El Tungurahua es uno de los volcanes más activos de nuestro país, durante los momentos de actividad, se ha caracterizado por la emisión continua de ceniza, vapor y otros gases y la ocurrencia de fuertes explosiones que forman kilométricas columnas de gases y ceniza y que frecuentemente producen detonaciones audibles (cañonazos), así como también de flujos piroclásticos. Al  contrario en los momentos de poca o escasa actividad, solo se observan emisiones de vapor y gases con escasa presencia de ceniza. Ambas situaciones se encuentran acompañadas de flujos de lodo o lahares originados por el mismo material sólido expulsado por el volcán en anteriores erupciones y depositado en los flancos del mismo, además de intensas lluvias en el sector, abruptas pendientes del edificio volcánico, poca permeabilidad del terreno y también a la gravedad.

El Instituto Geofísico, ha realizado continuos monitoreos a este fenómeno de  gran relevancia para poder  alertar a  las comunidades más vulnerables (parte occidental del volcán) a tiempo y así evitar decesos. El sistema que posee el Instituto permite conocer rápidamente la intensidad, magnitud, lugar y número de eventos suscitados. Considerando el promedio, la frecuencia, tamaño y ubicación; y ayudados de los informes semanales emitidos por el OVT, se decide continuar realizando el respectivo análisis estadístico iniciado en 2008 (Bustillos y Mac Farlin, 2008).