Antecedentes
El volcán Sangay está ubicado en la provincia de Morona Santiago, a 41 km al noroccidente de la ciudad de Macas. El periodo eruptivo actual empezó en mayo de 2019 y se mantiene hasta el momento. La actividad está caracterizada por la generación de flujos de lava, corrientes de densidad piroclásticas (flujos piroclásticos) producto del colapso de los frentes de estos flujos y emisiones de gas y ceniza. La dispersión de este último fenómeno en particular depende de la dirección y velocidad de los vientos dominantes en la zona del volcán.
Evento eruptivo del 8 de junio del 2020
Durante la noche del 8 de junio y madrugada del 9 de junio de 2020 el volcán registró un evento que estaría relacionado con el colapso de uno o varios frentes de lava que descienden por el flanco sur oriental del volcán. Asociado a este evento se han generado corrientes piroclásticas, las mismas que han alcanzado la cabecera del río Volcán, como se evidencia en las alertas termales registradas por FIRMS (Fig. 2-Izquierda). Adicionalmente, los reportes emitidos por parte de la Washington VAAC indican la presencia de una nube de ceniza en la atmósfera, la cual se dispersó hacia el sur occidente del volcán y afectó a las localidades ubicadas en esa dirección (Fig. 2-Derecha).
Reportes de caída de ceniza
Se recibieron varios reportes de caída de ceniza por parte de los entes de gestión de riesgos y los habitantes de las zonas afectadas, en las diferentes provincias, como, por ejemplo: Santa Elena, Guayas, Los Ríos, Chimborazo y Morona Santiago, Tabla 1. La mayor caída de ceniza fue reportada en el cantón Alausí (Fig. 3), sin embargo, se tuvieron reportes de caída leve hasta la provincia de Santa Elena.
Registros Sísmicos
El Instituto Geofísico mantiene una estación sísmica de banda ancha y un micrófono de infrasonido a 5 km de la cumbre del volcán. Desafortunadamente este sensor dejó de transmitir su señal el día 7 de junio a las ~21h30 de la noche (TL). Debido a la ubicación remota del mismo, no ha sido posible recuperar su señal hasta el momento. Sin embargo, utilizando otros sensores ubicados decenas de kilómetros al norte del volcán, se pudo confirmar una señal proveniente del Sangay que corresponde al periodo de tiempo en que se recibió los reportes de caída de ceniza (Fig. 4). Se nota que a partir de las 20h00 (TL) el 8 de junio, la energía sísmica mostró un aumento que duró varias horas. Con base en estas observaciones se puede inferir que esta señal podría estar asociada a una secuencia prolongada de colapsos de la frente de lava que desciende por el flanco suroriental del volcán.
Interpretación
Este tipo de eventos pueden darse en el volcán Sangay, con mayor o menor intensidad, causando afectación como la registrada la noche y madrugada de ayer (8-9 de junio) por caída de ceniza a nivel regional. A nivel proximal los colapsos del frente de lava generan corrientes de densidad piroclásticas (flujos piroclásticos) que son muy peligrosas y que pueden incidir en la dinámica del Río Volcán e incluso del río Upano, provocando crecidas y flujos de lodo (lahares). Eventos de similares características al actual han ocurrido en varias ocasiones (mayo, 2019; julio 2019; enero; 2020) durante el presente proceso eruptivo que se inició en mayo de 2019.
En caso de presencia continua de ceniza en el ambiente se recomienda no exponerse y proteger las vías respiratorias, los ojos y la piel.
El INSTITUTO GEOFÍSICO de la ESCUELA POLITÉCNICA NACIONAL mantiene la vigilancia volcánica durante las 24 horas, todos los días del año.
SVV, SH, MA, MS, FN, SH, BB
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
